Diálogos de sanación en Guatemala
Petén, una amplia zona del interior de Guatemala, fue y sigue siendo parte del corazón de la cultura maya. En el denso verdor de la selva, se siguen descubriendo aquí sitios arqueológicos y pirámides hasta ahora desconocidas. Aquí se encuentra el proyecto r4d «A case for One Health» (Surveillance and response to zoonotic diseases in Maya communities of Guatemala: A case for One Health).
Bendita transdisciplinariedad
Las tareas sociales complejas, en particular, suelen resolverse mejor de forma transdisciplinar. Así que no de una sola disciplina, sino de varias disciplinas científicas trabajando juntas e involucrando a todos los afectados en el proceso. En otras palabras, reuniendo a investigadores y profesionales, valorando la experiencia de cada uno y encontrando soluciones juntos.
Hay una escena de la película sobre el proyecto r4d «A case for One Health» que lo ilustra bien: en algún lugar de la selva tropical de Petén, un pollo enfermo es examinado. En un reflejo muerto, se ha rendido a su destino. Tata Crisantos, el sanador maya, dice: «Siento que tiene los pies fríos y la cabeza caliente. Debe tener fiebre y dolor».
Inmediatamente después, los veterinarios occidentales sostienen el ave en sus manos. Miran la piel y debajo de las alas. Educadamente y con un poco de timidez, Tata Crisantos pregunta: «Disculpe, tengo una pregunta». «Por favor», le anima el profesor de epidemiología Jakob Zinsstag, volviendo la cara hacia él. Ambos llevan un auricular de traducción simultánea en la oreja. «¿De qué cree que sufre este pollo? Me gustaría oírlo también de usted».
Eso es un diálogo a la altura de los ojos. En la película, ya no se oye lo que dicen, pero se ve cómo se abren los rostros de los dos hombres. Un ser humano es un ser humano, no importa si viene de los Alpes o de la selva tropical, si tiene cientos de publicaciones científicas o si lleva en sí mismo una biblioteca viviente. «Reconocemos que los y las terapeutas mayas son expertos empíricos, aunque tengan poca educación académica formal. Son extremadamente buenos en la observación. Conocen mucho mejor que nosotros los fenómenos que les rodean», afirma Jakob Zinsstag su respeto.
Foto 1: Tata Crisantos, Jakob Zinsstag y un pollo enfermo. Foto: proyecto r4d
Investigación como trabajo de paz
«Guatemala tiene una larga y violenta historia de no escuchar», explica la co-coordinadora del proyecto, Mónica Berger González. En la actualidad, la guatemalteca dirige el Departamento de Antropología Médica de la Universidad del Valle de Guatemala, en Ciudad de Guatemala. Durante una guerra civil que duró 36 años, los militares utilizaron una violencia brutal, especialmente contra la población indígena. Fueron tantos los muertos y desaparecidos durante esta época que hoy se considera un genocidio. Los mayas sólo obtuvieron el reconocimiento estatal a sus propias tradiciones y espiritualidad con el acuerdo de paz de 1996.
Pero siguen ocurriendo incidentes terribles hasta el día de hoy. En el verano de 2021, una turba mató a Domingo Choc Che, de 55 años. El sanador maya ayudó a documentar sistemáticamente las plantas medicinales en el marco del segundo proyecto r4d con sede en Guatemala, también coordinado por la Dra. Mónica Berger González. Acusado de brujería por alguien, fue secuestrado, torturado y quemado vivo. «Los y las autores están convencidos de que irán al cielo por expulsar ‘el mal o el diablo’ de sus pueblos», dice Mónica Berger González. «Hay una gran ignorancia sobre la práctica médica tradicional Maya, que a menudo es tachada de brujería». Tales acusaciones suelen provenir, por desgracia, de los círculos cristianos extremos, muy populares en Guatemala y América Latina.
«La parte más importante de un proceso transdisciplinario es la creación de confianza mutua.»
Mónica Berger González
El ejemplo subraya lo especial que es la interacción amistosa y respetuosa, tal y como se vive en «A case for One Health» y lo curativa que es para todos. También es un trabajo de paz el que se realiza aquí. «La parte más importante de un proceso transdisciplinario es la creación de confianza mutua», afirma Mónica Berger González. «Los ancianos mayas participan en proyectos transdisciplinarios con los investigadores porque les parece importante tender puentes juntos». El reconocimiento de su sistema de conocimientos influye en ello, así como la mayor facilidad para transferirlos a las nuevas generaciones. El objetivo es también extender la igualdad de derechos y la participación, tal y como se practica en estos proyectos, a otros ámbitos de la sociedad guatemalteca.
Diálogos a pie de cama
«La transdisciplinariedad ayuda a entender y ordenar la complejidad paso a paso», dice Mónica Berger González. Al proceder de dos sistemas de conocimiento médico diferentes, los participantes acordaron orientarse hacia objetos de interés común. Puede sonar difícil, pero es muy sencillo: en el caso de «A case for One Health», son las y los pacientes, personas y animales.
«Al llevar a cabo estos diálogos sobre la base de ‘objetos’ tangibles, creamos espacios en los que podemos aprender unos de otros», dice la antropóloga médica, ilustrando el proceso. Normalmente, las terapeutas mayas y los médicos occidentales no pueden hablar en abstracto de por qué creen que su tratamiento es más o menos apropiado que el de la otra persona. «A través de estos ejercicios de diagnóstico compartido alrededor de los y las mismos enfermos, empezamos a comprender las capas más profundas de una cultura. Encontramos lugares en los que podemos conectar, en los que hay posibilidades creativas e innovadoras para un desarrollo sostenible».
«La transdisciplinariedad ayuda a entender y ordenar la complejidad paso a paso.»
Mónica Berger González
No es frecuente que el personal biomédico y los y las curanderos indígenas de la medicina maya hagan sus diagnósticos al mismo tiempo. En el marco de «A case for One Health», este enfoque ha demostrado ser exitoso. «En este proyecto r4d pudimos desarrollar un método que sigue siendo muy útil hoy en día», dice Mónica Berger González con orgullo. Muchos jóvenes médicos de las universidades guatemaltecas se están sensibilizando de este modo con los enfoques interculturales.
Maravíllar y aprender
Para tratar al pollo enfermo, Tata Crisantos prepara una tintura de plantas. Las plantas tienen un papel destacado en el cosmos maya. Más tarde, Danilo Álvarez, veterinario de la Universidad del Valle de Guatemala, sostiene un pollo tras otro y les presiona el pico para que el curandero pueda administrar el líquido. También se moja generosamente el recinto de los animales y se limpia enérgicamente todo el patio en un ritual. Un enfoque sistémico integral, mientras que la medicina occidental utilizaría los antibióticos de forma selectiva.
«Ambas partes tienen soluciones. Juntos podemos lograr más que solos.»
Danilo Álvarez
Al día siguiente, Danilo Álvarez está sorprendido. No podía explicarlo, pero el tratamiento en el pollo enfermo había surtido efecto. El animal estaba en mejor forma de lo que podía esperarse, y eso en un tiempo notablemente corto. El veterinario reflexiona positivamente sobre el pluralismo médico: «Ambas partes tienen soluciones, juntos podemos lograr más que solos», dice convencido.
One Health: ver la salud humana, animal y medioambiental como una sola
Las intervenciones sanitarias deben adaptarse a la realidad local, y no al revés. «En última instancia, todos queremos mejorar el bienestar y la calidad de vida de los y las pacientes», explica Mónica Berger González. Gracias a la apreciación de la medicina maya, ahora pueden recibir tratamientos culturalmente más adecuados para ellos y ellas. «Deben estar plenamente informados y luego poder decidir de forma autónoma y sin sentirse confrontados entre dos sistemas», subraya Jakob Zinsstag la soberanía de las y los pacientes. Por ejemplo, una mujer en la película dice: «Primero quiero un ritual con el curandero maya en mi casa. Entonces estoy lista para ir a un hospital para una operación».
«Todos queremos mejorar el bienestar y la calidad de vida de los y las pacientes.»
Mónica Berger González
Cuando se trata de la atención sanitaria a las poblaciones periféricas, Jakob Zinsstag recomienda encarecidamente un enfoque de One Health. One Health significa el intercambio y la estrecha colaboración entre la medicina veterinaria y humana, en lugar de las acciones miopes ó aisladas. La continuación consecuente de esta perspectiva también integra el ecosistema. Al fin y al cabo, es fundamental para la salud de las personas y los animales: «Como humanos, tenemos una relación ineludible con nuestro entorno y los animales que viven en él con nosotros», explica el epidemiólogo del Instituto Suizo de Salud Pública y Tropical de Basilea. «Por eso, en One Health la salud de los seres humanos, los animales y el medio ambiente se consideran una sola».
Especialmente desde el brote de Covid-19, este enfoque también ha sido reconocido desde lo más alto por la Organización Mundial de la Salud y la Organización Mundial de la Alimentación y la Agricultura (OMS y FAO). Ya no se puede negar la relación entre la degradación del medio ambiente y las pandemias. «El enfoque de One Health permite dar respuestas más rápidas y eficientes a las enfermedades infecciosas, evitar pandemias y, en última instancia, lograr un gran ahorro económico», asegura Jakob Zinsstag.
Foto 2: Reunión de la comunidad de San Marcos Poptun y ceremonia maya para inaugurar la clínica de salud del proyecto One Health. Foto: proyecto r4d
De hecho, un equipo dirigido por Mónica Berger Gonzáles fue capaz de desarrollar un sistema de vigilancia de los casos de COVID-19 en las comunidades indígenas de Guatemala. Se basa en el sistema de vigilancia de zoonosis de «A case for One Health».
Además de los y las terapeutas mayas, también participaron en el discurso transdisciplinar «A case for One Health» representantes de los ministerios guatemaltecos de salud pública, agricultura y sanidad animal, así como comadronas, que tradicionalmente llegan a los rincones más remotos y conocen los males de la población. «Por supuesto, se necesita un tiempo para llegar a un consenso transdisciplinario», admite Jakob Zinsstag, tomando como comparación los procedimientos de consulta en la política suiza. «Pero por eso las soluciones resultantes son muy sólidas, porque todo el mundo las apoya».
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Sources
Autora:
Iris Staubesand
Proyecto:
One Health (Surveillance and response to zoonotic diseases in Maya communities of Guatemala: A case for One Health)
Versión alemán de este artículo aquí